A las niñas, les obsequiamos un detalle algo más infantil, en este caso unas pequeñas cruces, y en colores. Tan solo había tres niñas, así que os muestro las que les regalamos, en otra ocasión os mostraré algunas más que hice hace algún tiempo y que llevé a la tienda de una amiga, sinceramente, he estado tan liada que desde que las llevé no he podido pasarme para saber si las vendió o no.
En esencia la idea es la misma de las cruces que lucen en los decenários, aunque como ya he dicho, estás son más coloridas, y están terminadas en laca, lo que les confiere un alto nivel de brillo, y espero que de resiténcia a los usos de los niños. Están montadas en cordón de cuero de colores, y escoltadas por bolas plateadas de zamak. La verdad, tardaron en ponérselas, lo mismo que tardaron en abrir las bolsitas en las que iban guardadas.
Espero que os guste el resultado final de estas cruces, sencillas y con un cierto aire mexicano, al menos, a mi me recuerdan muchísimo ese tipo de artesanía.