Hoy el día ha amanecido nublado y bastante más frio que días anteriores. Parece que de repente ha entrado el otoño en escena, y parece también que ahora tiene intención de instalarse entre nosotros, así que creo que ya debemos sacar las solapas, los foulares y las bufandas a escena, y con ellos, los broches para adornarlos un poco más.
Los broches no son tampoco unas piezas que realice con frecuencia, pero a finales del invierno pasado hice un par de piezas por encargo, bueno, en realidad me encargaron uno, pero cuando no tengo instrucciones muy precisas sobre el encargo, acostumbro a realizar dos piezas diferentes para que elijan el que mejor se ajuste a las pretensiones de la clienta. En este caso, tan sólo se me había pedido un broche imitando madera, y con forma de flor, uffffff, en principio sencillo, pero el termino "flor", ese termino es amplio, así que hice un broche con una sola flor, y otro con varias.
Al final mi amiga se quedó con el que veis bajo estas lineas, la verdad, quedó bastante más vistoso.
Este otro, se lo regalé a mi cuñada.
Aquí os dejo otra fotito con los dos juntitos.
Ahora que vuelve el frio, tendré que plantearme hacer algún brochecito más, ya ando rondando algún modelo diferente, algo más elaborado, seguramente utilizando la técnica del modelado, pero por ahora tengo que madurar más mis ideas.
2 comentarios:
Te quedaron preciosos los dos ^.^
Graciassssssssss.
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